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Idiota y limitado mental

Idiota y limitado mental

Por Pascual Serrano

¿Quién dijo que el presidente George Bush junior no nos daba más que disgustos?. La recién fundada editorial Laetoli acaba de publicar "El libro bobo de Bush", parafraseando aquel "Libro rojo de Mao". Se trata de una antología de "bushisms", es decir, errores, lapsus y tonterías diversas pronunciadas por el presidente norteamericano.

Hasta hoy habíamos leído algunas en diferentes textos y mensajes que circulaban por internet, ahora las 136 páginas de este pequeño libro las ha recopilado citando el lugar y la fecha en que se pronunciaron. Y es que, según afirma su traductor, Carlos Alvarez, la caza y recopilación de meteduras de pata de Bush es "casi un deporte nacional en Estados Unidos". Gracias a este libro podemos saber que la Casa Blanca "es blanca", tal y como respondió el presidente a un niño que se lo preguntó el 19 de julio de 2001. Aprender algo de matemáticas: "Hemos triplicado la cantidad de dinero, creo que hemos pasado de 50 millones de dólares a 195 millones disponibles" (Lima, 23 de marzo de 2002). 

Podemos conocer cómo es una democracia participativa: "Como saben, éstos foros son abiertos, pueden venir y escuchar lo que tengo que decir (Washington, 28 de octubre de 2003). Incluso nociones de cinegética: "Recuerden simplemente que son los pájaros los que se supone que sufren, no el cazador" (Roswell, 22 de enero de 2004).

Y es que el presidente Bush tiene grandes capacidades: "Os prometo que escucharé lo que se ha dicho aquí, a pesar incluso de no haber estado presente" (Waco, 13 de agosto de 2002"), y un gran sentido de la convivencia: "Creo que los seres humanos y los peces pueden coexistir pacíficamente" (Saginaw, Minch., 29 de septiembre de 2000). Descubrimos a un presidente que posee un gran manejo de la economía: "Desde luego es un presupuesto: tiene un montón de cifras" (Reuters, 5 de mayo de 2000). Y también, claridad en su programa electoral: "La tercera prioridad de la campaña es dar la primera prioridad a la enseñanza" (Web oficial de George W. Bush).

Sin duda cualquier personaje público hubiera podido cometer alguno de esos lapsus, ahora bien, conseguir todos los que se publican en esta obra requiere tener un problema de capacidad mental. Leerlo nos sitúa entre el dilema de sonreir ante afirmaciones tan estúpidas o llorar al pensar en manos de quién está el mayor arsenal militar del mundo. Esperemos que las próximas elecciones de Estados Unidos eliminen esta segunda opción. En cualquier caso, ya lo dijo Bush el 21 de agosto de 2000: "No sé si voy a ganar o no. Creo que sí. No sé si estoy preparado para el puesto. Y si no lo estoy, ¿qué mas da?".  Las mejores Bushadas del emperador  George W. Bush, presidente de Estados Unidos, cada cierto tiempo nos obsequia algunos chascarros que desatan carcajadas en todo el mundo. Pero el 2005 se convirtió en todo un hito, o si no cómo sería posible olvidar el famoso “papelito” pidiendo permiso para ir al baño o el choque al enfrentarse con una puerta inexistente. Errar es humano y divierte en exceso especialmente cuando se trata del hombre que lidera la invasión a Iraq desde el 2003.  El 2005 dejó algunos pasajes de antología sobre el hombre que dirige el país más poderoso del mundo. Una de ellas seguro será incluida en cualquier biografía del mandatario norteamericano. ¿Recuerda?, se trata del humilde “papelito” donde pedía permiso para ir al baño a Condoleezza Rice, su secretaria de Estado, justo en medio de una importante reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, donde estaba sentado al lado de embajadores y líderes de otros quince poderosos países. Un acierto fotográfico de la Agencia Reuters nos permitió ver la insólita salida de protocolo o evidenciar un notable desconocimiento de las reglas en estas altas cumbres.  

“¿Creo que necesito una pausa para ir al cuarto de baño? ¿Es posible?”, escribió el hombre al mando del país que hace gala de la hegemonía en el ordenamiento mundial. En todo su derecho estaba, hay que decirlo, porque las necesidades vitales son para todos los mortales, aunque a veces, Bush se eleve a la categoría de Dios.

Así nada menos, porque ya sea por obra de la confusión o a falta de una buena oratoria, el mandatario de la nación del norte nos sorprendió con frases como esta: “Dios los ama y yo también los amo. Y pueden contar con nosotros dos como un poderoso mensaje que aquellas personas que ahora están muy preocupadas por su futuro, pueden oír”. La reciente y suprema amistad fue revelada en Los Ángeles en el 2004.  Y siempre dispuesto a sorprendernos en momentos en que se tratan problemas graves, Bush tuvo una inusual y jocosa equivocación al terminar una conferencia de prensa con el primer ministro de China, Hu Jintao. Airosamente se retiró del podium donde se dirigía a los periodistas, pero la puerta no se abrió... Insistió e insistió y la porfiada cerradura no hizo caso de los movimientos y gestos que el confundido Bush exhibía. Sorprendido, exclamó: “Estaba tratando de escapar, pero no ha funcionado”. Pese a su intento de hacer pasar inadvertido el suceso no solo la sala de periodistas se llenó de risas, sino que la imagen fue inmediata comidilla para cuanta persona quiso burlarse del Presidente.  Su preocupación alcanza para todo, por lo que no hay que engañarse porque sus consejos fueron directos: “Aliméntate bien y debes adelgazar”, le dijo a través del teléfono para darle parabienes a su colega y amigo que acababa de salir de un hospital en Jerusalén.  Y como el Presidente de EE.UU. pasa varios meses del año en su rancho, sabe bien de lo que habla, por eso le dijo a Sharon que debía trabajar menos, “el solo leer tu agenda diaria me cansó”, confesó George W.  LAS DEBILIDADES… DEL LENGUAJE  Si hay algo que abunda en la vida de este mandatario son las recién bautizadas “debilidades del lenguaje”, que comentan incluso quienes lo siguen en sus actividades diarias. La falta de cultura y desconocimiento de países distintos al suyo, han sido su característica permanente y parece ser que no son habilidades necesarias para gobernar en EE.UU.  Signo o no de falta de preparación, lo cierto es que provocan risa por provenir de él, y convencidos de que llamarán la atención de todos los lectores, les regalamos algunos, sacados de una compilación de frases conocido como “El libro Bobo de Bush”, distribuido hace algunos meses por el periódico argentino Página 12. Disfrútelas:  “Tengo el honor de estrechar la mano de un ciudadano valiente iraquí, quien tiene su mano cortada por Saddam Hussein”  Washington DC, Mayo 25, 2004  “Tendré una política exterior orientada hacia el extranjero”  Redwood, California, 27 de septiembre de 2000  “No tengo la menor duda: estamos preocupados por el sida dentro mismo de nuestra Casa Blanca”.  Washington, 7 de febrero de 2001  “Hacemos todo lo posible para poner fin a la solución”.  4 de octubre de 2001  “Tampoco hago mucho análisis. ¿Saben?, no dedico mucho tiempo a pensar en por qué hago las cosas”.  A bordo del Air Force One, 4 de junio de 2003  “Echo un vistazo a los titulares solo para hacerme una idea de lo que pasa. Leo las noticias muy pocas veces y me informan de ellas personas que probablemente sí las han leído”.  Washington, 21 de septiembre de 2003  “Un superávit significa que habrá dinero de más. Si no, no se llamaría superávit”.  Kalamazoo, Missouri, 27 de octubre de 2000.  “Desde luego esto es un presupuesto: tiene un montón de cifras”.  Reuters, 5 de mayo de 2000  “Si te despiden, te quedas sin empleo al ciento por ciento”  Green Bay, 3 de septiembre de 2001. (Fuente: La Nación, Chile/Juventud Rebelde)    

1 comentario

Bernardo Echeverri Angel -

George W Bush no solo es un "bobito" que llegó a la Casa Blanca gracias a las maniobras de su padre. Quien dispuso del poderío militar más grande del mundo -nada más- es un retrasado mental incapaz de administrar un burdel-